El mundo está cambiando a pasos agigantados, siendo cada vez más las tecnologías, impensables hace unos años, que están surgiendo, y más los nuevos negocios que ofrecen mayor comodidad a la vida de las personas. En este contexto, algo tan habitual en la segunda mitad del siglo XX como la compra de coches propios, está siendo sustituido por servicios de alquiler de vehículos con conductor, debido al ahorro de costes que supone.
Esto contrasta con el uso de los móviles, que ya se han confirmado como elementos esenciales en el día a día de la gran mayoría de personas. Y, además, tienen influencia directa en el menor uso de vehículo propio, ya que con el smartphone se puede acceder a las diferentes opciones de transporte que ofrece una ciudad, ya sea metro, bus o renting de automóviles.
El estudio ‘Europcar MobilityGroup España’ pone de manifiesto lo anteriormente mencionado. En este informe se recoge que más de la mitad de los conductores renunciarían antes al coche que al móvil. Y es que, como se menciona en TICBeat, miramos el móvil cada 44 segundos, lo cual evidencia una dependencia bastante grande.
La nueva forma de concebir el transporte se focaliza, según el estudio, en personas jóvenes de entre 18 y 24 años, que tienen una gran afinidad al hecho de alquilar un vehículo (20,1%), compartir uno (18%) o acudir a un vehículo de suscripción (17%).
Los servicios de alquiler de coches, un fenómeno en crecimiento
Es evidente que el uso de automóviles propios sigue siendo bastante elevado, presentándose como algo esencial para familias que viven a las afueras de ciudades y que necesitan de este medio de transporte para acudir al trabajo o para hacer cualquier actividad que no sea laboral. Sin embargo, en grandes ciudades, el transporte contratado, ya sea público o privado, está teniendo un crecimiento muy grande, fundamentalmente porque los costes de este son mucho menores a los de tener que mantener un vehículo.
Tanto es así, que numerosas empresas de transporte con conductor, también conocidas como VTC, han empezado a aumentar su flota de vehículos y conductores para dar el mejor servicio a las personas necesitadas. Las estrategias de cada una de estas compañías son muy diferentes, pudiendo encontrarnos en la Comunidad Valenciana con marcas que buscan solamente el precio más reducido, sin tener demasiado en cuenta la calidad del servicio, así como otras, como Autoelegance, donde la experiencia del usuario y la comodidad son la prioridad.